“Blanco”, me cuidan bien aquí. Me han separado de mis cinco hermanos de sangre. Es verdad que desde que me elegiste, me miraban mal. La envidia seguramente. Pero han puesto estas malditas fundas sobre mis pitones. Se supone que es para no dañarlos o hincarlos en la carne de mis congéneres. ¡Mentiras! Es para preservarte a ti, “Blanco”, para que no cojas miedo a la vista de mis astas, porque debajo de estas feas protuberancias se esconden dos navajas afiladas como espadas de Toledo.
Acércate “Blanco”, te gusto ¿verdad? Esto también me lo han dicho. Mira las marcas de fuego que se dibujan en mi lado derecho: el hierro de Hato Blanco y este magnífico “7” en mi paletilla. El numero de la suerte o el guarismo que certifica mi edad de razón. ¿No te asusta? En este año 2012, es un número maldito en el campo. Me observas y te gusta mi manera de andar, tranquilo como si nada, descolgado, con el hocico a ras de suelo. Y mi trapío “Blanco”; tengo buenas hechuras ¿verdad? Eso me viene de mi padre y de su procedencia Guateles. De mi madre he heredado su mirada noble.
Ahora acércate un poco más, “Blanco”. Entra en el círculo prohibido y desata mi rabia. Enciende la llama que brilla en mis ojos negros. Entonces hincharé el morrillo y tensaré mis músculos. ¡Cómo cambian las apariencias en una fracción de segundo! Noto tu corazón que se acelera. Aquí tienes el retrato del que va a atormentar tus noches y alimentar tus pensamientos. No te vayas, tengo una última cosa que decirte.
Me llamo 'Ruiseñor', y pertenezco a una gran reata. Dentro de poco haré temblar la arena y la plaza entera contendrá su respiración. Soy la fuerza, la bravura, el pilar de vuestras tradiciones, y tengo que honrar a mi familia y a mi ganadero porque debo defender mi reputación. Cinco años esperando este momento. Tengo ganas de que llegue el gran día. Nuestro gran día… »
Fotografía 'Ruiseñor' y Ramon Bellver 'El Blanco', febrero 2012 © Florent Lucas